Otro giro del
caleidoscopio Jueves 23 de agosto 2012 edición 73
El
caleidoscopio comenzó a girar escuchando a un folklorista reconocido internacionalmente, Atahualpa Yupanqui, quien eligió ese nombre
en memoria de los últimos gobernantes incaicos. Fue cantante, cantautor,
guitarrista y escritor.
Un
hombre
políticamente comprometido y activo que recorrió todo el país, especialmente la
zona del noroeste en busca de testimonios de las viejas culturas aborígenes. Sufrió
la cárcel y la censura. Fue un emigrado político y París lo adoptó, allí tuvo el título de Caballero de las Artes y de
las Letras de Francia. Imposible no recordar su Lunita tucumana
A
causa de su afiliación al Partido Comunista su obra sufrió la censura durante
la presidencia de Juan Domingo Perón. Fue detenido y encarcelado varias veces.
Al respecto ha dicho Yupanqui: «En tiempos de Perón estuve varios años sin
poder trabajar en la Argentina. Desde esa olvidable época tengo el índice de la
mano derecha quebrado. Una vez pusieron
sobre mi mano una máquina de escribir y luego se sentaban arriba, otros
saltaban. Buscaban deshacerme la mano pero no se percataron de un detalle: me
dañaron la mano derecha y yo, para tocar la guitarra, soy zurdo..»
Fue, como tantos compatriotas, más
reconocido en el exterior que en su propio país. Muy pocos argentinos saben que
sus trabajos forman parte de los libros de texto de primaria y secundaria en
Francia, o que en 1985 fue premiado en Alemania Federal como el autor del mejor
disco grabado por un artista extranjero.